“No podemos ayudar a todos, pero todos pueden ayudar a alguien”, una frase que alguna vez dijera el presidente norteamericano Ronald Reagan, y que encuentra sentido al ser acogida por aquellos individuos y organizaciones cuyo propósito fundamental es ayudar a cambiar la historia de naciones y comunidades, ¡una vida a la vez!
Como la vida misma, las acciones altruistas evolucionan y se adaptan al contexto, a los tiempos y las tendencias que vienen con ello. Y son cada vez más las figuras sociales y empresariales que utilizan sus plataformas en beneficio de causas sociales, dando paso a la colaboración entre organizaciones, una forma de ejercer el trabajo humanitario que se encuentra en constante evolución en la medida en que avanzan los años, llevando las acciones de beneficencia hacia una nueva y mejorada versión: la Filantropía 2.0.
Esta tendencia ha sido adoptada alrededor del mundo y potenciadas por figuras del ámbito social a las que se unen estrellas del cine, la música, la monarquía y los grandes empresarios socialmente responsables que buscan generar cambios positivos en su entorno, organizaciones que persiguen el objetivo de, a través del trabajo colaborativo, contribuir al avance de las comunidades, potenciando un impacto que va más allá de lo económico. En términos simplificados, se trata de las mismas acciones humanitarias, pero utilizando nuevas plataformas, tendencias y herramientas para impulsar proyectos sociales en beneficio de la niñez, las familias, las empresas y una sociedad más justa, potenciando el efecto de dar y su alcance social.
Así, la Filantropía 2.0 busca involucrar a los individuos en los procesos benéficos que cambian vidas, no solo desde una perspectiva de los aportes económicos y bienes materiales, sino que plantean cuestiones filosóficas sobre el rol fundamental que jugamos los seres humanos en el curso de nuestra propia historia, invitando a la reflexión y a tomar acciones que pueden redireccionar el rumbo de nuestras sociedades.
Ejemplos sobran. Desde sus plataformas, a través de los años las figuras de trascendencia social han utilizado su influencia y alcance para promover cambios sociales en beneficio de quienes más lo necesitan. Desde Lady Diana hasta Kate Middleton y Meghan Markle; desde Keanu Reeves hasta Ricky Martin y Carlos Vives… la lista es interminable.
Una filantropía donde todos participan
Hoy todos podemos participar del las acciones que generan cambio. La Filantropía 2.0 es también la evolución y transición de las actividades caritativas hacia el entorno digital. Esta transformación ha proyectado las causas sociales en un plano casi universal, ha hecho posible que esa necesidad de ayudar pueda ejercerse desde cualquier lugar, en cualquier momento. Las facilidades que ofrece la tecnología hoy, permite a las organizaciones trascender sus fronteras físicas, recibiendo donaciones y la colaboración de personas de alrededor del mundo que buscan aportar un granito de arena en diferentes proyectos sociales.
Con la digitalización de sus causas, las organizaciones hoy llevan esperanza a individuos y comunidades que viven en situaciones de vulnerabilidad, buscando la colaboración de las comunidades para poder continuar ejerciendo una labor caritativa en beneficio de una sociedad con menos desigualdad.
GoFundMe es una de estas entidades que personifica el significado de estas acciones altruistas; un proyecto social que ha habilitado plataformas digitales para la recaudación de fondos destinados a suplir las necesidades de individuos en aspectos como la salud, situaciones de emergencia que ponen en peligro la vida y la educación.
Las organizaciones en República Dominicana no son la excepción, aquí también se ha adoptado esta filantropía transformada. Buscando dar respuesta al déficit habitacional, la falta de acceso a la salud y la educación, ONG como Jompéame, TECHO RD, y Hábitat para la humanidad RD, han reforzado su presencia digital con campañas que educan sobre las necesidades que buscan satisfacer con su trabajo social, ofreciendo también la oportunidad de colaborar en las diferentes causas con aportes monetarios y el reclutamiento de mano de obra.
En sus sitios web, más que una encarecida solicitud de ayuda, encuentras historias, testimonios de vida que revuelven las emociones, despiertan esa sensibilidad humanitaria e invitan a la reflexión, buscando la colaboración por un mundo más justo, más igualitario. Porque, en palabras del escritor inglés John Bunyan, “la verdadera grandeza es cuánto sacrificio estás dispuesto a hacer por los demás”.
