Mucho se habla de los ejercicios y la frecuencia del entrenamiento para mantener una salud optima. Es común encontrar información sobre los múltiples beneficios que trae mantener una rutina de entrenamiento que, entre otras, incluye retrasar el envejecimiento de las células, lo que se reflejará en una apariencia más jovial a lo largo de los años. Sin embargo, otro aspecto sumamente importante que no se aborda con la misma frecuencia es la necesidad de mantener una rutina de ejercicios actualizada, que rete al cuerpo, lo saque de la zona de confort y, sobre todo, que resulte en una mejor salud física, mental y emocional.
Aunque lo ideal seria poder contar con un profesional de la salud física o el fitness, que pueda proveer la guía para una rutina de ejercicios optima, si lo que buscas es refrescar tu entrenamiento, puedes lograrlo siguiendo estos consejos:
Revisa tus avances y actualiza tus objetivos
Recuerda que los músculos tienen la capacidad de adaptarse ante la exposición constante a una misma rutina de ejercicio, por lo que, si llevamos varias semanas, o incluso meses, entrenando con una misma rutina; es hora de revisar esos avances y replantearnos objetivos nuevos con una rutina fresca, que juegue con el peso, la intensidad y la cantidad de repeticiones.
Alterna la intensidad de las rutinas
No se trata de solo cambiar los ejercicios que componen la rutina, también es necesario cambiar la forma en que los hacemos. Con frecuencia, seguimos un mismo patrón entre series y repeticiones, lo que en consecuencia ayuda a mantener la misma intensidad con que trabajamos. Para alternar la intensidad, se recomienda trabajar con un objetivo de 10-15 repeticiones durante una semana, y para la siguiente semana hacer series de seis a ocho repeticiones.
Adicionalmente, ayudará variar la carga de cada serie, para de esta manera sacar el máximo provecho de ejercitar cada grupo muscular.
Añade nuevos ejercicios y cambia el orden
Mucho se habla del orden correcto para hacer los ejercicios. Lo ideal siempre es iniciar una rutina de ejercicios con estiramiento, musculación y concluir con una buena rutina de cardio. Sin embargo, para darle un pequeño giro a tu rutina de ejercicios puedes probar realizar ejercicios nuevos, añadir días exclusivos para musculación y alternar con otros días dedicados al trabajo cardiovascular.
Adicionalmente, alterna los días que dedicas para trabajar cada grupo muscular. Cambiar el orden en que con frecuencia entrenas cada músculo puede tener un impacto positivo en los resultados a largo plazo.
Pero lo más importante a tener en cuenta cuando buscar actualizar tu rutina de ejercicio es siempre llevarlo tu rutina a tu ritmo, conocer tu cuerpo y como trabaja, conoce tus limites y, sobre todo, ten en cuenta que el proceso de adaptación muscular puede tomar de 4 a 6 semanas, por lo que antes de pedir un cambio en tu rutina de entrenamiento, enfócate en dominar a la perfección los ejercicios dentro de tu plan de entrenamiento.
No cambiar de rutina no siempre implica hacer siempre lo mismo, busca formas innovadoras de sacar el mayor provecho posible a la rutina que ya tienes, agregando potencia a tus entrenamientos, pero siempre teniendo en cuenta que la seguridad va primero.
