Fotos: Víctor Siladi y Fuente externa
ARQUITECTO.
Indudablemente que la República Dominicana posee una riqueza sin igual en cuanto a emblemas históricos y culturales, ya que forman parte de la identidad nacional, cuyos monumentos aguardan en sus espacios la historia viva de nuestro pasado, la misma que nos ha redefinido en el presente y que contribuye a forjar un mejor mañana para la nación. De ahí radica la relevancia de su valor porque ayudan a construir memorias colectivas y a fomentar el sentimiento de pertenencia de la población.
Hemos conversado con el director de Patrimonio Monumental del Ministerio de Cultura, Juan Mubarak, quien nos ha explicado de forma detallada el proceso transformador y evolucionista al que han sido sometidas las emblemáticas edificaciones, que dicho transcurso se ve caracterizado por el respeto a su integridad y autenticidad, producto de una planificación de un sistema de protección y gestión que garantice su salvaguarda.
“Entender la importancia de una edificación histórica, sea religiosa, militar o civil, es fundamental. Los procesos de restauración deben contar con una meticulosa investigación (histórica, arqueológica, de materiales, física de la propia edificación en su evolución histórica, así como un proyecto de restauración), que le debe proveer al restaurador la información necesaria para su rescate y puesta en valor”, afirma Mubarak.
Sin embargo, se ha visto cómo algunos de estos tesoros históricos han caído en total abandono por la falta de atención de las autoridades pertinentes que, en los últimos 25 años, han dejado a un lado la revalorización de los centros históricos y, como tal, su preservación.
El director de esta entidad cultural ha manifestado que la significancia que se le han dado a estas estructuras durante la actual gestión gubernamental ha sido más que ardua, al establecer que: “Actualmente, a través del Ministerio de Turismo con el apoyo del gobierno central, se están destinando fondos para el mantenimiento y preservación de los principales monumentos e imagen urbana en la Ciudad Colonial fuera de los fondos BID. Hay que anotar que los demás centros históricos, así como lugares declarados Patrimonio Nacional, requieren atención”.
Cabe destacar que, desde que asumió el rol de dirigir ese órgano institucional, se ha planteado la meta de inventariar y ver las condiciones del Patrimonio Nacional tal como lo describe el Reglamento 4195, por lo que han estado viajando por todo el país, verificando la lista y, además, en busca de otros que no han sido tomados en cuenta.
“Ahora mismo estamos desarrollando tres proyectos importantes que tienen como objetivo darle una actualización a la base legal del patrimonio, estos son: actualización Ley Patrimonio Nacional; conjuntamente con la Dirección Nacional de Inventario y el ADN, una Actualización del Inventario de los Bienes Inmuebles de la Ciudad Colonial de Santo Domingo en donde se plantea una la revisión de la categorización de los mismos, y Generar los Criterios de valoración para la determinación de la declaratoria de Patrimonio Nacional de los lugares e inmuebles que así se requiera”, puntualiza.
“Se requiere urgente un Plan de Gestión del Patrimonio Nacional, el cual sirva para la salvaguarda del patrimonio y poder tener fondos para proyectos de investigación y adecuación de los mismos”.