Al estilo de Rosanna Eloy
Fotos: Alberto Liranzo
En su hermosa morada en Santiago de los Caballeros, nos esperaba Rosanna Eloy, una aficionada a la cocina, con quien compartimos en una agradable tarde de té, llena de detalles, elegancia, historias y carcajadas.
Con la dulzura que le caracteriza, Eloy nos narra que su amor por el arte culinario surgió desde pequeña. Recuerda estar siempre alrededor de la cocina. Le gustaba cuando en casa se preparaban algunas recetas y les hacían historias sobre ellas. Desde allí, aprendió a amar la preparación de los alimentos, para luego montar la mesa y sentarse a disfrutar en familia.
Para Rosanna, cocinar es meditar, es una expresión de arte, es un acto de amor. Esa pasión por la cocina que se alojó en su alma desde su niñez, la llevó a la creación de lo que hoy es una realidad, su emprendimiento gastronómico que ha llamado Homemade by RossEloy, en el que pone en práctica lo que aprendió desde niña: recetas de familia, heredadas e inspiradas en los que ama. Con gran emotividad, nos expresa la satisfacción que le produce ver cómo alrededor de sus platos son creados momentos en los que se comparte con amigos y familia, rescatando un poco lo que hemos ido perdiendo por la inmediatez de las cosas.
La propuesta gastronómica que trae a nuestros lectores es un suculento postre conocido como pavlova, el postre de las bailarinas. Nos narra que su historia se origina cuando el chef de un hotel agradó con la deliciosa tarta a la afamada bailarina rusa de ballet Ana Pavlova, en una de sus giras en 1926. A partir de ello, así se conoce este exquisito postre, el cual fue inspirado estructuralmente en un tutú de ballet.
También, nos dice que sus hijas Miranda y Simone bailan ballet desde muy pequeñas, son su inspiración para cada una de sus pavlovas: llenas de color, frescas y ligeras como ellas.
Pavlova
Ingredientes:
6 claras de huevo
1 1/4 tazas / 250 g azúcar blanca
2 cucharaditas de maicena
1 cucharadita de vinagre blanco
1 cucharadita de extracto
de vainilla
Para cubrir:
1 1/4 tazas / 300 ml crema
batida pesada
• Frutas frescas
Preparación:
-Precalentar el horno a 130ºC/260ºF. Cubrir una bandeja para hornear con papel de cera.
-En el tazón de una batidora de pie o en un tazón grande si está usando una batidora manual, agrega las 6 claras de huevo.
-Asegúrate de no dejar ningún rastro de yema de huevo en las claras de huevo o no se batirán.
-Enciende la batidora a velocidad media; batir las claras de huevo hasta que se formen picos suaves, aproximadamente 2-3 minutos.
-Una vez que se hayan formado picos suaves, agregar 1 cucharada de azúcar a la vez a las claras de huevo mientras se baten continuamente. Debería tomar alrededor de 5 minutos agregar todo el azúcar.
-Continuar batiendo durante otros 5-7 minutos
a velocidad media.
-Agregar la maicena, el vinagre y la vainilla
a la pavlova y mezclar bien.
-Vertir la mezcla en la bandeja para hornear forrada y forme un círculo con una espátula. La pavlova no se supone que se vea perfecta, ¡los bordes irregulares son parte de la belleza!
-Colocar en el horno durante unos 50 minutos. Cuando termine el tiempo, apagar el horno sin abrir la puerta y dejarlo enfriar por completo durante al menos 6-8 horas o toda la noche es mejor.
-Cuando esté lista, batir la crema a punto
de nieve.
-Colocar la pavlova en un soporte para pasteles o plato y cubrir con la crema batida. Decorar con frutas frescas a su gusto.
