Ella es Emma-Louise Corrin, la hermosa actriz británica que encarna a Diana de Gales en la serie The Crown en Netflix. Con tan solo 25 años ha alcanzado una popularidad enorme, y es que su papel tan importante, de una de las personalidades históricas de Londres, hizo que renacieran las constantes dudas de la vida de Lady Di.
Nació en Royal Tunbridge Well, el 13 de diciembre de 1995, pero se mudó a muy temprana edad a Seal en Sevenoaks, en el condado de Kent, Inglaterra. Su madre es Juliette Corrin, una profesional que trata a personas con alteraciones de la audición, el lenguaje y la voz, la fonología; su padre es Chris Corrin, un empresario en ese país. La actriz no es hija única, es la hija mayor, tiene dos hermanos: Richard y Jonty.
Estudió en un internado que impartía docencia católica, allí desarrolló el interés por la actuación y la danza.
Más adelante decidió estudiar eso que sí le pasiona, asistió a un curso de Shakespeare en la Academia de Música y Arte Dramático de Londres, además fue profesora voluntaria en una escuela de Sudáfrica. Continuó sus estudios, específicamente en arte dramático en la Universidad de Bristol. En el 2015 estudió teatro, artes e inglés en St. John’s Collage de Cambridge.
Sus inicios fueron interpretando papeles sencillo en Grantchester y Pennyworth; en 2020 fue reconocida por interpretar a Jillien Jessup, Miss Sudáfrica en Misbehaviour.
Hoy reconocemos el gran talento de la actriz en la cuarta temporada de The Crown. En esta serie tiene un papel protagónico, como era en la vida real Lady Di.
¿Sabías qué?
Algo muy curioso es que al audicionar para la serie, intentaba calificar para interpretar a Camilla Parker-Bowles, pero luego, se mostró muy interesada por el papel de Diana Spencer, es por ello que dedicó mucho tiempo a imitar cada uno de los gestos y movimiento de la princesa; no solo eso, se informó de la psicología y personalidad para poder ser quien representara su vida.