Fotos Joseph Okpako y Mark Horton
“UN TALENTO RECONOCIDO EN UNA INDUSTRIA SELECTA”
EL REY DEL JAZZ
En esta edición especial nos adentramos en la cuna por excelencia del jazz, New Orleans; y quién mejor que Michael Bublé, un artista canadiense que, con su prodigiosa voz, llena de elegancia y sutileza, se ha consolidado como una de las más reconocidas del género. Este cantante, compositor y actor es uno de los más importantes en el panorama actual, gracias a su extraordinaria capacidad vocal que le ha hecho merecedor de cinco premios Grammy, y un registro de 75 millones de discos vendidos, debido a su estilo romántico y seductor que hace que el público de los más exigentes gustos musicales se rinda a sus pies.
Nuestras páginas se llenan de ritmo y se convierten en un repertorio de melodías que relatan la historia de este talentoso artista canadiense, sumergiéndonos en un fascinante recorrido por su vida, sus sentimientos y su impecable trayectoria musical de más de dos décadas llenas de éxitos. El ídolo de hoy, era un niño proveniente de una familia de pescadores que soñaba con ser un cantante famoso. Para lograr la realización de este anhelado sueño, contó con la complicidad de un abuelo que pagaba sus clases de canto y realizaba trabajos gratis a cambio de oportunidades en el mundo artístico para su nieto. En el presente, es un fenómeno mundial que ha despertado en el público el interés por temas clásicos de legendarios artistas y otros de su autoría, a los que da vida con su inigualable estilo, la dulzura, elegancia y suavidad de su voz, consolidándose como una de las voces más representativa del jazz, hasta el punto de ser considerado el “Frank Sinatra moderno”.
“Le cantaba a mi abuela después de ser diagnosticada con Alzheimer, porque mientras ella se olvidaba de muchas cosas, nunca olvidaba las letras de las canciones”.
Conoció el mundo de la música escuchando la colección de discos de su abuelo Demetrio Santagà, un ser muy especial que propició sus primeros intentos como cantante a los 16 años, pues hacía trabajos de plomería gratis a cambio de que le permitieran cantar a su nieto en los escenarios de los clubes nocturnos donde brindaba sus servicios. Su antecesor le pagó sus primeras clases de música, además de enseñarle a cultivar el amor por el jazz y las grandes voces estadounidenses, que marcaron para siempre sus gustos musicales y su carrera artística, llevándolo a versionar durante su trayectoria musical, canciones de reconocidos artistas de la talla de Frank Sinatra, Tony Bennett, Nat King Cole, Elvis Presley y Ella Fitzgerald. Estas grandes leyendas de la música que antes eran inalcanzables para él, sirvieron de inspiración para convertirse, en la actualidad, en un icono como ellos. “Después de veinte años, es un gran privilegio y un honor perpetuar el legado de mis héroes para, algún día, ver llegar una siguiente generación que siga con ello”, afirma el afamado intérprete.
El artista que ha cautiva a millones de admiradores alrededor del mundo, en su adolescencia cantaba canciones desinhibidamente a una audiencia de dos abuelos por las noches. De esa etapa, rescata una hermosa anécdota que denota la nobleza y sensibilidad inculcada en el hogar, y es que el canadiense le cantaba a su abuela después de ser diagnosticada con Alzheimer, porque “mientras ella se olvidaba de muchas cosas, nunca olvidaba las letras de las canciones. Así que iba a la cocina con ella, la agarraba y bailábamos”, narra el virtuoso cantante.
“Vengo de una familia trabajadora, amorosa y de tanta integridad que es difícil que algo de ello no se te pegue”.
De las entrañas de una familia de pescadores nació este gran ídolo, quien ayudaba en los veranos en el negocio familiar de pesca hasta que se convirtió en un exitoso cantante. Este fue probablemente el trabajo más duro de su vida, pero fue sin duda el que lo formó como el gran ser humano que es hoy, gracias a las instrucciones de sus amorosos padres: Lewis Bublé, quien se desempeña como pescador, y su madre Amber Bublé, una ama de casa de raíces italianas, quienes forjaron en Bublé y sus hermanas Crystal y Brandee el amor incondicional y la empatía. “Al igual que muchos, no venimos de una familia rica. Vengo de una familia trabajadora, amorosa y de tanta integridad que es difícil que algo de ello no se te pegue”, manifiesta.
175,200 horas de impecable trayectoria, que tienen su génesis cuando fue descubierto por un destacado productor musical, llamado David Foster, en el año 2000, y en sus muchos intentos fallidos, mientras trataba de abrirse paso en la industria musical. Luego de participar en varios concursos y lograr hacer algunas presentaciones, hizo su debut con el lanzamiento de su exitoso álbum Homónimo, logrando gran aceptación y posicionamiento en el público, ocupando uno de los primeros lugares en su natal Canadá, en Inglaterra, Australia y en Sudamérica, debido a sus magistrales interpretaciones, que incluyen piezas de diversas épocas, entre las que destacan: The Way You Look Tonight, You’ll Never Find Another Love Like Mine y For One in My Life, con las que cautiva y encanta a sus admiradores. Fue indudablemente el disco que cambió y edificó su carrera.
“Cuando escucho una melodía es como si escuchara la voz de Dios. Es la cosa más mágica que hay en el universo”.
Un amor más allá de las fronteras. Su historia es el vivo ejemplo de que el amor te sorprende en lugares menos sospechados, desafiando la distancia, el idioma y otras tantas cosas, simplemente para zambullirnos en una nueva cultura que hemos de construir con el ser amado. Michael Bublé y su esposa, la actriz argentina Luisana Lopilato se conocieron en un encuentro fortuito en un camerino del Teatro Gran Rex en el 2008, luego de un show que ofreció el cantante en Buenos Aires, Argentina. Lopilato tocaba el saxo y le encantaban las canciones de Bublé, por lo que decidió comprar las entradas para disfrutar de su espectáculo, sin saber que ese día conocería el que luego se convertiría en el amor de su vida. Todo comenzó cuando un chico de la discografía le preguntó a la actriz si quería tomarse una fotografía con Michael; aunque al principio dudó, accedió a tomársela, produciéndose un cruce de mirada entre ellos, quedando de inmediato el intérprete prendado de su belleza.
Su idílico romance se desarrolló tras mantener comunicación vía correo y chats, mientras ambos se esforzaban por aprender el idioma. Al transcurrir un tiempo, el afamado compositor le comunicó que regresaría a visitarla, y al año siguiente anunciaron su compro[1]miso. El cantante canadiense y la actriz contrajeron matrimonio en una ceremonia de ensueño en una estancia en Argentina en el 2011; meses después, realizaron una ceremonia simbólica en Vancouver, Canadá, donde es originario el artista. Desde entonces, el mundo es testigo de la devoción y respeto que se profesan a través de las redes sociales, fruto de ese amor son sus cuatro hermosos retoños, a quienes nombraron: Noah, Elías, Vida y Cielo. Al referirse a ellos, el artista expresa con emotividad: “Mis hijos me han dado un propósito de vida y han hecho que días como estos sean aún más dulces, porque puedo entender y apreciar mejor los buenos momentos”.
Un evento que sacudió su vida. En noviembre del 2016 una desgarradora noticia estremeció su vida: su primogénito Noah, de tan solo tres años fue diagnosticado con cáncer de hígado. De repente todo cambió y la felicidad de la familia se detuvo ante tal acontecimiento. Michael y Luisiana pusieron sus carreras en pausa para dedicarse por completo al cuidado del niño. Afortunadamente, el tratamiento fue un éxito, la intervención quirúrgica, el tratamiento de quimioterapia, sumado al amor y la entrega de la familia como medicina por excelencia, dieron sus frutos y su hijo Noah ganó la batalla contra la terrible enfermedad.
Tras la recuperación del pequeño, la familia volvió a su casa en Canadá, y la pareja retomó su carrera artística. El canadiense calificó el evento como el peor momento su vida, sin dejar de atesorar las enseñanzas que le dejó esta difícil experiencia: “Toda mi vida y mi perspectiva, mi visión filosófica sobre cómo es todo y sobre qué importa, todo cambió en un abrir y cerrar de ojos. Y es algo bueno, porque tengo mucho que agradecer”, asegura.
Celebra por todo lo alto tres décadas en las que ha dejado huellas con su elegante voz que ha plasmado en once discos, conquistando cinco premios Grammy, 75 millones de discos vendidos y catorce mil millones de reproducciones de sus canciones en internet, una sumatoria que registra el éxito del talentoso canadiense de 47 años, que en la actualidad celebra con un corazón agradecido su séptima gira mundial, en la que presenta los temas de su más reciente disco Higher, brindando un espectáculo memorable en el que hace gala de sus seductores movimientos y su majestuosa voz con la que cautiva los escenarios alrededor del mundo.
CONFESIONES ÍNTIMAS
Nombre Michael Steven Bublé
Una cualidad que le defina Perfeccionista
Ídolo musical Elvis Presley
Artista que influenció tu carrera Dean Martin
Rutina antes de grabar “La preparación. Y puede sonar cursi, pero muchas veces tomo mi teléfono y veo una foto de mi esposa e hijos”.
Su abuelo Demetrio Santaga es… Mi ídolo y mi amigo. “Me amaba demasiado y me enseñó a cultivar el amor por el jazz y las grandes voces estadounidense”.
Deporte predilecto “el hockey sobre hielo, me gustaba mucho y quería ser jugador profe[1]sional para el Vancouver canucks”.
Películas y series en las que ha participado “Los expedientes secretos X” (“The X Files”), “Mortal challenge”, “Daddy Daughter Trip”, “Totally Blonde”, “Duets”, “Da Kath & Kim Code”, “The Disney Family Singalong”.
Cantantes latinos que escucha “Me encanta Julio iglesias, Luis Miguel, Julieta Venegas, Maná, más antiguo Carlos Gardel”.
“Por mucho que yo aporte a esa gente que escucha mi música, nunca me acercaré ni de lejos a lo que ellos le han aportado a mi vida”.
