Tanto la moda como las joyas también estuvieron presentes al momento de la coronación del rey Carlos III, no solo las finas piezas pertenecientes a la realeza de Inglaterra, así mismo las que sus invitadas sacaron a relucir en este importantísimo acto de regocijo.
La reina Suthida de Tailandia sacó a dar un paseo muy especial a las joyas de zafiro de la reina madre Sirikit, un collar de diamantes del cual pendía un gran zafiro, unos aretes con la misma piedra y un anillo y pulsera a juego que se estima podría ser autoría de Van Cleef & Arpels.
La reina Máxima de Holanda fue con menos joyería, su outfit estuvo adornado con dos hermosos pendientes que simulaban un par de botones de diamantes, los cuales forman parte de la tiara Estuardo. Una diadema que la reina Emma de los Países Bajos encargó en 1897 en Frankfurt al joyero Eduard Schürmann & Co. para regalársela a su hija, después Guillermina I, con motivo de la celebración de su mayoría de edad.
La reina Matilda, estuvo adornada por un pendiente de mariposa el cual estaba colocado en su atuendo, un hermoso collar repleto de perlas y una pulsera que complementaba tu outfit. Esta bella mariposa, la cual fue el centro de atención Fue comprado en 2014 por el joyero Martin du Daffoy en una venta organizada por Drouot’s en París por 8.400 euros. Por lo que la esposa del rey Felipe de los belgas podría habérselo comprado después o tratarse de un préstamo.
La princesa Mary de Dinamarca optó por resaltar su fina joyería al ponerla en contraste con su atuendo, unos hermosos pendientes y un broche de turquesa colocado sobre su traje color morado, realzando singularmente las tonalidades de la piedra.
La reina Letizia de España, eligió como único complemento un par de aretes en tonos plata, los cuales contaban con una hermosa piedra de un tamaño considerable, bordadas con un metal, plata también, de un gran grosor.
