Hace 26 años que Jackie Kennedy no está entre nosotros, sin embargo, siempre será recordada como una de las mujeres más importantes del siglo XX. Su elegancia, buen gusto y excelentes modales la hacían destacar. Como primera dama jugó un papel protagónico en la gestión de gobierno del expresidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy.
Cabe resaltar que su belleza, atraía mucho la atención de las cámaras. Todos se preguntaban, ¿cuál será el secreto de su belleza?
A continuación sabrás más acerca de las atenciones que esta famosa figura le daba a su cuerpo.
Para iniciar Jackie tenía una rutina de cuidado de la piel hecha a su medida. Esta información pudo ser conocida gracias al Museo del Maquillaje de la ciudad de New York, institución que tiene en su poder los documentos en los cuales están registrados estos datos.
Entre las notas escritas a máquina, con fecha del 1 de mayo de 1963, figura una lista con claras instrucciones dadas a la hermosa newyorkina. Esta también incluía algunos consejos para su marido, quien fue asesinado solo seis meses después de la fecha de las notas del dermatólogo.
El texto revela que esta glamurosa dama padecía problemas con los brotes y el acné. La indicación que muestra la nota original del doctor, era que nunca se aplicara más aceite o cremas en la cara de lo que se le aconsejó de otra manera, «los bultos nunca desaparecerán y, en cambio, los puntos negros y las espinillas sí».
Estas pautas específicas, se encuentran basadas en el hecho de que la pareja se dirigía a Cape Cod, Massachusetts, de vacaciones, las que se convertirían en las últimas de la pareja.
El primer enunciado que puede leerse es que los procedimientos deben seguirse siempre que la temperatura supere los 70ºF (21ºC) hasta finales de septiembre.
Por otra parte, el Dr. Laszlo le recomienda a su paciente que use el mismo tónico facial en sus axilas cada vez que se lo aplique en la cara, recomendando su Light Controlling Lotion, producto que todavía permanece en el mercado.
En cuanto a su alimentación, el especialista le aconseja consumir alimentos ricos en proteínas, seguramente de acuerdo a su tipo de piel: dos huevos duros para el desayuno y mucho pescado, de cualquier tipo.
También agregó que podía comer ‘tostadas de Hollywood’: pan con mantequilla cortado en círculos y tostado a fuego lento con un huevo escalfado, miel y té con leche desnatada para el desayuno, seguido de carne asada y requesón para el almuerzo, y carne con ensalada de berros para la cena.
Sin duda alguna, la bella imagen de Jackie se debía a la gran disciplina que tenía en cuanto al cumplimiento de sus rutinas.
Según la revista Vanidades, la cofundadora y directora ejecutiva del Museo del Maquillaje, Doreen Bloch, describió el documento como «una joya histórica».
«Habla del papel de la mujer en la sociedad y de la importancia de la belleza y las imágenes perfectas en la política en las décadas de 1950 y 1960», añadió.
