RITMO CULTURAL.
Juana I de Castilla, “la loca”
Historia.
¿¡Normal!, cuando la vida hace juegos extraños? Sería anormal. Juana I de Castilla, conocida como Juana la Loca nos heredó el gran Escudo de la Ciudad de Santo Domingo de Guzmán. Mujer de pasión, obediente, silenciosa, jinete diestra, tocaba el clavicordio, políglota, devota hasta el punto de haber deseado ser monja; madre de seis hijos y política… demasiado para una dama de su época.
Mucho se ha hablado de ella aunque en realidad todo se torna en virtud de un único enfoque, que perdió el juicio al morir su esposo. Ningún documento avala su demencia, al menos así lo afirma María Teresa Ruiz de Catrain, quien disertó sobre el tema como parte de la segunda conferencia pre celebración de los Conciertos de la Villa de Santo Domingo, que tuvo lugar en la Quinta Dominica. Allí, la historiadora habló sobre lo que a partir de ahora se escribe.
Juana de la Casa de Trastámara, tercera hija de Fernando e Isabel la Católica, fue concebida durante la Edad Media, un período en el que tanto España como Francia se disputaban por “La Perla” (Italia). Como todos los herederos de la Corona, fue parte de las estrategias sociales y políticas de la época, por lo que en 1495 los Reyes Católicos acordaron con Maximiliano una alianza matrimonial por partida doble, en la que su segundo hijo y primogénito varón Juan se uniría con Margarita, archiduquesa de Austria; y Juana con el archiduque Felipe, heredero del ducado de Borgoña.
La conexión de esta figura real con el festival es porque el 7 de diciembre de 1508, por un Real Privilegio de Juana de Castilla, se concedieron escudos a la isla Española de Santo Domingo y a las 15 villas existentes en ella.
Ambos con la finalidad de acorralar a Francia. Si todo hubiera transcurrido con normalidad, no le hubiese correspondido la corona; pero los lugares que se interponían, a razón del orden de nacimiento, se desplazaron de la siguiente manera: su hermana mayor, Isabel, fue casada con el príncipe de Portugal, en busca de preservar la paz con Portugal y garantizar un heredero. Ella murió en el parto… y el pequeño, dos años más tarde.
Juan, de salud débil, en su afán de engendrar un hijo, muere a causa del exceso de sexo con su esposa, quien tuvo la dicha de quedar embarazada, pero con la maldición de dar a luz un niño muerto. Catalina de Aragón esposa del rey Enrique VIII; y María, fueron las hermanas menores.
La locura
A la edad de 17 años enviaron a Juana a conocer a su prometido Felipe, conocido como «el Hermoso». Va con la dote más grande que registre la historia, acompañada de una flota no armada de 69 naves y 3500 hombres. El encuentro se atrasa porque el archiduque está en batalla.
Lo esperado llegó. Al mirarse por primera vez la atracción física fue inmediata y ese mismo día, por los deseos sexuales de él, deciden casarse, alejados del pomposo festejo real correspondiente. Leonor, Carlos I de España y V de Alemania, Isabel, Fernando (nacido en España), María y Catalina, fueron los nacidos de este singular amor.