Siempre se sentirá más cómodo en un espacio que le guste. Todo es diseño y la calidad del diseño afecta, aunque no lo percibamos, a nuestras vidas. Después de usted, su casa, su habitación, la mesa en la que come, todos los espacios en donde su cuerpo esté debe ser una máquina de felicidad. Ahora entiendo a William Morris cuando, de forma acertada, dijo: “No tengas nada en tu hogar que no tenga un uso o que no creas que es bello». La arquitectura es el arte de gastar el espacio, por lo tanto, ¡ama el color, toma riesgos y se curioso! “No existe una casa tan mala que no pueda convertirse en algo que merezca la pena», así lo dijo Elsie de Wolfe y no es más que pura verdad. La decoración con armonía, inspirada en las cosas naturales, es como un hechizo. Es un acto mágico que pretende lograr efectos sobrenaturales por la paz y alegría que pueden trasmitirte, esta, queridos lectores, es Aerin Lauder.
“Hay algo en la belleza natural y en hacer que una casa sea cómoda,
acogedora y sin esfuerzo. La idea de la falta de esfuerzo es algo muy importante para
quienes somos y una sensación casual de lujo que une a personas de todas las
edades”.
Recibir una invitación a uno de sus eventos es realmente inspirador y único. Aerin Lauder es una de las diseñadoras más icónicas, creadora de tendencias en el diseño y una de las mejores anfitrionas. Su línea revela cómo debe llevarse la belleza, el estilo, la personalidad y la alegría, no solo en celebraciones, sino también en la
decoración del hogar, la forma de vestir y la fragancia que utilizas.
Aerin es una experta en marcar en la vida de las personas. El concepto “sencillez y elegancia” es una leyenda del estilo de vida. Desde muy temprana edad, su abuela le dio la mejor lección de vida: el concepto real de la belleza. Estée Lauder es la mentora de su éxito, así lo manifiesta. Siempre le habló de cómo todo puede ser hermoso si te tomas el tiempo y reconoces la importancia de un excelente cuidado de la piel, las fragancias y las habitaciones. Para ella, elegir el espacio adecuado, incluyendo muebles, adornos, accesorios, colores y todos los aspectos de
la ambientación de interiores, y conseguir que todo conjugue a la perfección para transformar un espacio común y corriente en una obra de arte, es sinónimo de placer, de guardar en la memoria momentos inolvidables.
Los innumerables viajes que hizo en familia, cuando era niña, por ser su padre, Ronald Lauder, un embajador de Estados Unidos en Austria, le permitió conocer toda Europa y visitar las grandes mansiones de muchos países. Estas aventuras ampliaron sus horizontes en cuanto a cultura, creatividad y conocimiento. Su madre, una de las
más importantes patrocinadoras del Museo de Arte Moderno de Nueva York, siempre manifestó su afición por el arte, es una herencia que corre por sus venas.
“Creo firmemente que el lujo es lo opuesto al logo.”
Estudió Comunicación en la Universidad de Pennsylvania. Luego, se dedicó a aprender sobre el conglomerado Estée Lauder, una firma integrada por más de veintiún marcas de lujo, incluidas La Mer, Bobbi Brown y Tom Ford. Hoy, Aerin es directora de imagen de la firma, fundada por su abuela en 1942, además de haber creado su propio imperio en el diseño.
Inició su marca pensando que había un vacío en el mercado que marcaría un estilo de vida basada en la narración, elementos feministas, herencia y calidad, creando productos que fomentaran a un estilo sin esfuerzo, sin sacrificar el lujo y la autenticidad. La empresaria es amante de lo clásico, inspirándose en su abuela, quien amaba las flores, los pájaros, los detalles femeninos y el oro, todos reproducidos como un visaje, un regalo a su Estée.
“Mi abuela siempre me dijo que había que equilibrar el trabajo con la familia.
Aunque ella trabajó mucho, fue también una magnífica madre, una maravillosa
abuela y una extraordinaria mujer. Balancear todo esto no es fácil, pero ella es mi
modelo”, asegura.
“Aerin es un reflejo de mi personalidad, de mis gustos. Siempre me ha entusiasmado la idea de crear un hogar. Es algo que aprendí de mi abuela, que disfrutaba comprando almohadones y piezas de decoración, velas y flores», afirmó la diseñadora. Está de acuerdo con una de las frases que escribió en su autobiografía la abuela Estée: «Yo soy una mujer y mi hábitat natural es un hogar encantador, decorado con los muebles más refinados y elegantes», confesó durante una entrevista.
“Creo que a Estée le encantaría absolutamente lo que hemos creado. Es muy
femenino, muy lujoso, muy auténtico: la herencia y la narración son inspiradoras «. –
Aerin Lauder.
Su último proyecto se publicará este 22 de septiembre, su libro Entertaining Beautifully, una guía basada en la tradición familiar entrelazada con su propia visión contemporánea. Es un texto ricamente ilustrado, en donde se presenta su enfoque para organizar eventos importantes y festivos, desde una cena floral de primavera, hasta un picnic con rollo de langosta en un bote. Organizado por temporada, incluye capítulos sobre familiares y amigos con estilo, como un homenaje a Estée Lauder y sus legendarias veladas.
Confesiones íntimas
Película Favorita: Milagro en la Calle 34.
Un dulce: Bastones de menta de Williams Sonoma.
Bebida: Champaña.
Un Placer: Chocolate.
Una Fragancia: Tuberose Le Jour & Le Soir.
El mejor regalo: Libros.
Mejor regalo que has recibido: Un cachorro.
Vacaciones perfectas: Un país tropical.
Un detalle: Adoro los tulipanes y los ranúnculos, aunque considero que el florero
también es muy importante.
Un consejo para un anfitrión: Servir comida que guste a tus invitados.
Un regalo para la anfitriona: Una vela perfumada.
Una cristalería: Las reproducciones de vasos de bar antiguos diseñadas por Adolf
Loos. Siempre elijo vasos de agua de colores vivos.
Una vajilla: Me gustan las pintadas a mano por Sydney Albertina.
Un mantel: Cualquiera de Muriel Brandolini.
Una bebida: Vino rosado muy frío en verano y en invierno suelo ofrecer vino tinto y
blanco.